Los estrellas masculinas que despiertan más suspiros entre la platea femenina han superado ampliamente las cuatro décadas, y Hollywood oscila entre la preocupación y la desesperanza porque, según la prensa especializada, ya no existen hombres. Ocurre que íconos con el porte de Johnny Depp (43), Brad Pitt (43), George Clooney (45), Tom Cruise (44) y Keanu Reeves (42) ya no son fáciles de encontrar. Y aunque han surgido otras figuras como Orlando Bloom, Matt Damon y Ben Affleck, para el público y los comunicadores ninguno se asemeja a los mencionados anteriormente. Quienes podrían acercarse a los “irresistibles cuarentones” son Heath Ledger y Jake Gyllenhaal que protagonizaron la controvertida película “Secreto en la montaña”, en la que interpretan a dos cowboy gays enamorados. Sin embargo, ellos parecen llevar bien alto el estandarte del cine independiente y, por consiguiente, buscan alejarse de la industria que mueve millones de dólares, con la que es posible conquistar innumerable cantidad de corazones. Otro galán que está en la mira de los productores y directores es el joven Elijah Wood (el popular Frodo de “El señor de los anillos”). Sin embargo, el actor tampoco quiere encasillarse en el rol de galán propiamente dicho. De hecho, en sus últimos filmes, apostó más por los papeles de asesino (“La ciudad del pecado”) o de adolescente obsesivo (“Una vida iluminada”).
Las malas lenguas indican que, por mucho que se esfuercen, los ingleses Colin Farrell (el poco afortunado protagonista de “Alexander”), Jude Law (recordado por su papel en “El talentoso señor Ripley”) y Hayden Christensen (el Anakin Skywalker de “La guerra de las galaxias”) no logran protagonizar éxitos de taquilla resonantes como sí lo han hecho los maduros norteamericanos, muchos de los cuales parecen haber encontrado la fórmula de la eterna juventud.
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